II. MODELOS DE ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD
MODELOS DE ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD
INCLUSIÓN EDUCATIVA
Para empezar, es importante resaltar, en mi opinión, un buen modelo educativo es aquel que hace que el/la niñx sea activo, que el sea el propio dueño de su aprendizaje y aprende de una forma lúdica y segura, donde sea capaz de forjar su aprendizaje a base de juegos y teniendo de apoyo al profesorx, pero siempre como guía no como alguien autoritario.
· Segregación:
Los niños que son diferentes tienen que estar en otra aula diferente.
· Integración:
Dentro del aula hay una PT, todos juntos, pero hay dos profesoras trabajando.
· Inclusivo:
Si hay apoyo que sea extraordinariamente para todos, pero sin estandarización.
Adaptar recursos y metodologías para que puedan ser trabajados por todos,
aunque no con el mismo aprendizaje. En un contenido hay tres niveles, cada uno
elegirá hasta dónde quiere llegar.
- Segregador:
- Diversidad aplicada a colectivos
- Escolarización en centros especiales
- Centrado en el déficit del alumnado
- Programación diferente para cada alumno según capacidades
- Integrador:
- Diversidad aplicada a colectivos más amplios
- Escolarización en centros de integración prioritaria
- Centrado en la adaptación
- Adaptaciones curriculares
- Inclusivo:
- Diversidad aplicada a toda la población como cualidad
- Escolarización en centros ordinarios
- Centrado en el contexto. Cambia el contexto educativo para incluir a todos
- Diseño Universal del Aprendizaje (potencial de aprendizaje).
Una educación NO inclusiva es aquella que incluye a alumnado con NEAE en los centros ordinarios (Casanova, 2011) , que además los selecciona con estándares culturales de normalidad y una vez aceptados en ese centro se les agrupa en función de niveles educativos.
En cambio la educación SI inclusiva es aquella que valora las diferencias como oportunidad de enriquecer la enseñanza-aprendizaje y no como obstáculo a evitar (León. 2012) y además posee una perspectiva desde la que analizar los desafíos de la inequidad en la educación escolar (Echeita, 2017).
Podemos considerar educación inclusiva como un proceso de fortalecimiento de la capacidad del sistema educativo para llegar a todos los educandos (UNESCO, 2009).
Para poder conseguir una verdadera educación inclusiva debemos empezar a transformar el sistema para que todos estén en igualdad de oportunidades y puedan apoyarse en una educación de calidad para el desarrollo de su personalidad. Esto dará oportunidad a que se puedan desarrollar como personas como un yo, saber cómo son, y lo que quieren hacer.
Estos cambios deben ser:
• Instalaciones y equipos adaptados
• Apoyo al profesorado en el aula
• Participación de las familias y comunidad
Respecto a las implicaciones didácticas, son aquellas encargadas de dar respuesta a las capacidades, necesidades y motivación, y son:
• Cambios Organizativos
• Cambios Organizativos
• Cambios Metodológicos
Por último hay una diferentes dimensiones de inclusión educativa, y se dividen en tres niveles:
• Aprendizaje
• Participación
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